Servicios gestionados
Entendemos por servicios gestionados a aquellos brindados por un proveedor de servicios (en este caso de telecomunicaciones e IT) que están destinados a la administración de manera remota de la infraestructura tecnológica e informática de un cliente final.
Los servicios gestionados tuvieron su origen en la década de los 90 cuando nacieron los proveedores de servicios de aplicaciones; de tal manera surgió una oferta de soluciones muy efectivas para alojar aplicaciones remotas.
Los proveedores de este tipo de nuevos servicios marcaron el inicio de un nuevo paradigma en el que las compañías proveedoras ofrecían soporte de forma remota para las infraestructuras TI de sus clientes.
Hoy por hoy cada vez más habitualmente tanto empresas, como negocios y hasta particulares han decidido recurrir a este tipo de servicios. Los servicios gestionados son un recurso muy valorado por empresas de todo tamaño, como también por profesionales autónomos, ya que no necesitan disponer de perfiles especializados en IT y telecomunicaciones en sus estructuras de personal.
De tal manera, se establece una relación profesional y de confianza entre la empresa proveedora que presta los servicios gestionados y el usuario final que los contrata.
Los empleados de la primera, realizando su trabajo en forma remota, muestran una actitud proactiva en sus funciones profesionales. Es decir, no esperan a que surja un determinado problema o anomalía en la infraestructura del cliente, y que este los tenga que alertar, sino que realizan gestiones continuas de monitoreo, mantenimiento y mejora de los servicios anticipándose y previendo cualquier inconveniente que pudiera presentarse.
En todos los casos dichos servicios están siempre adaptados de forma personalizada y precisa a las necesidades de cada cliente.
¿Qué valor agregado aportan los servicios gestionados?
La idea es ahorrar trabajo al cliente, evitando distraer personal propio del mismo en este tipo de tareas, personal que incluso en algunos casos tampoco está totalmente capacitado para este tipo de gestiones específicas. En este caso si bien se delegan responsabilidades en el proveedor del servicio gestionado, se le exigen al mismo dos condiciones claras en este modelo colaborativo, a saber: que no haya degradación en la calidad del servicio, ni falta de alineación en los objetivos, y también una una actitud comprometida y expedita.
Ante este tipo de situaciones, recurrir a los servicios gestionados es una alternativa muy conveniente desde el punto de vista estratégico. Mediante la conexión en forma remota con los servidores y equipamientos remotos de la compañía, se puede monitorear y gestionar mediante acciones convenientes todo lo necesario para asegurar la continuidad de los procesos del cliente final.
Uno de los principales beneficios que ofrecen los servicios gestionados es que, gracias al avance de la tecnología, en la actualidad pueden encargarse de la gestión y administración de todo tipo de procesos, tanto operativos como de mantenimiento de la red informática y de telecomunicaciones del cliente.